Paolo Mazza es Gerente General de Mercado Circular, una empresa enfocada en ayudar a otras marcas a convertir sus cadenas de valor lineal, en circular y transformar las categorías de consumo masivo desechable, en uno con fin de retornabilidad.
Mercado Circular es una empresa que tiene 5 años de historia, la cual nace de una empresa familiar, con más de 130 años de historia y que ha sido traspasada de generación en generación. Desde sus orígenes hasta hoy ha mutado bastante, ajustándose a los cambios sociales, económicos y medioambientales, para hoy, tener su foco en ayudar a empresas y marcas que desean convertir sus cadenas de valor lineal en uno circular, además de transformar las categorías de consumo masivo desechable, en uno con fin de retornabilidad
Su modalidad de trabajo es B2B, lo que quiere decir, que Mercado Circular, entrega servicios a otras compañías, con el objetivo de mejorar las ventas de sus productos y bienes que ofrecen. Es decir, una transacción comercial entre empresas.
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Para el año 2016 se aprobó en Chile, la Ley Rep la cual tiene como principal instrumento la Responsabilidad Extendida del Productor (REP), mecanismo en virtud del que los productores de productos prioritarios son responsables de la organización y financiamiento de la gestión de los residuos derivados de la comercialización de sus productos en el país. Ante aquello, Mercado Circular surge desde la interrogante de sus creados sobre si sé podía vender sin contar con un envase.
Después de mucho analizarlo, sus fundadores decidieron en el año 2017, aventurarse en esta idea y lanzar un modelo piloto para probar la recepción del público. Tal como lo cuenta su dueño, no quisieron estudiarlo a través de un estudio de mercado, pues consideraron que verlo en la práctica les permitiría mucho más entender el comportamiento de los usuarios con la marca y su experiencia con ésta.
Fue así como consiguieron un local en Viña del Mar, donde probaron suerte vendiendo productos de limpieza a granel, invitando al consumidor a vivir una experiencia que rescataba las antiguas tradiciones de nuestras generaciones. sumado a la tecnología de las nuevas. La experiencia rápidamente sumó adeptos, los cuales iban con sus envases para rellenarlos con los productos que necesitaban y generando así una economía circular.
Poco a poco descubrieron que la idea gustaba entre los clientes, por lo que expandirse tomó más fuerza, como también mejorar su tecnología. Al averiguar sobre máquinas, programas, software, entre otras cosas, descubrieron que la información y productos disponibles eran casi nulos a nivel mundial, por lo que decidieron comenzar a realizar sus propias investigaciones.
En medio de todo esto, apareció la Pandemia la cual los puso en jaque, pero también los impulsó a expandir su negocio. Entendieron que las condiciones eran adversas, que las personas sólo tenían dos permisos semanales de dos horas cada uno, por ende privilegiaron comprar todo en un mismo lugar, y no ir con su envase por 4 o 5 productos a una sola tienda. Es por ello, que Mercado Circular decidió llevar sus productos a donde iban sus clientes e instalar máquinas dispensadoras de autoservicio en lugares estratégicos.
“Con el tiempo nos dimos cuenta que estas no son sólo máquinas, nos permiten rastrear toda la trazabilidad del producto, asociado a eso en las máquinas tenemos un software que nos permite ver todo en línea, desde cámaras con micrófono donde podemos ver la interacción del cliente con la máquina, hasta verificar el stock de los productos. La máquina es una creación nuestra, no desde las piezas, si no, desde sus funciones, nosotros pensamos que queríamos lograr y lo hicimos posible” señaló Poalo Mazza. Hoy la máquina ofrece comprar o rellenar, por ende, tiene la capacidad de reconocer si el envase es nuevo o ya ha sido utilizado, lo que también influye en el valor del producto final, incentivando la reutilización de envase y disminuir la contaminación.
Paolo Mazza, indicó que “No hay tiempo, se necesita una colaboración ahora ya. Se necesita un enfoque multidisciplinar, desde la académica por sobre todo, para mi un gran ausente que no pone el conocimiento en la economía circular y medio ambiente”. En la misma línea señaló que es importante que las personas tomen conciencia sobre su propia responsabilidad con el medio ambiente, comprendiendo las toneladas de basuras que las mismas personas botan, invitando a preferir esta nueva forma de mercado, mucho más consciente y amigable con el medio ambiente y las próximas generaciones.
Comercio Circular, es una empresa de más de 130 años, que tiene el fiel compromiso de pensar en el mundo que le estamos dejando a las futuras generaciones, en forjar un sello que logre traspasar de generación entendiendo sus necesidades y desafíos. De igual forma aportar a una mirada de 50 años donde los hogares chilenos sean 0 residuos.
Fuente: https://laquintaemprende.cl/